Idealmente, no debemos tener líneas dentro del cuadrángulo, excepto por aquellas como la línea del destino, que siempre lo atraviesan. La hepática (línea de la salud) es otro ejemplo. Otras líneas tienden a dificultar el progreso, además de causar confusión y preocupación. Lina ausencia total de líneas en el cuadrángulo tampoco es buena. Indica que la persona no está creciendo ni madurando en su camino por la vida. Marcas, tales como cruces, estrellas o cuadrados, son una buena señal cuando se encuentran dentro del cuadrángulo. (Veremos estas marcas en el siguiente capítulo).

El período marcado por el cuadrángulo (edades de 35 a 49) es importante. La persona aún es joven, pero ha ganado madurez y es probable que esté revalorando su progreso hasta ese momento, antes de seguir adelante. Muchos experimentan un total cambio de dirección durante esta etapa. Lo más probable es que se trate de un cambio de carrera o pareja, pero los cambios pueden ser en cualquier área de la vida del individuo.

En este período, la persona está cosechando los beneficios de todo lo que ha hecho hasta ese momento. Si todavía no se ha logrado algo, es probable que este sea un tiempo de sobriedad en que se da cuenta de que todos los sueños de su juventud nunca se harán realidad, a menos que comience a forjarlos rápidamente.

Es común que quienes no han logrado algo, prácticamente se rindan en esta etapa y pasen el resto de la vida culpando a los demás por su falta de éxito. Estos individuos tendrán una línea del destino que termina dentro del cuadrángulo.

Todos tenemos el poder y la capacidad de cambiar. He visto varios casos donde la línea del destino empezó a alargarse cuando la persona se dio cuenta que sentarse y quejarse no iba a solucionar nada, y si quería progresar debía comenzar a nctuar. Una vez que las personas sean conscientes de eso y empiecen a aplicar el viejo adagio "si ha de ser, depende de mi" sus líneas del destino crecerán para reflejar este cambio de perspectiva.

Quienes ya han alcanzado un grado de éxito, es probable que usen este tiempo para progresar más. En estos casos la línea del destino posiblemente se extenderá mucho más allá de la línea del corazón.

En ocasiones verá una línea del destino que se divide en una serie de pequeñas líneas o puntos dentro del cuadrángulo. Esta es una señal de fracaso total hasta el punto que la persona carece del deseo o la fuerza para intentar de nuevo conseguir ti éxito. Esta es una tragedia, pero también he visto ejemplos en que personas con tal rasgo han tomado ti control de sus vidas, y creado una línea del destino que avanza otra vez. Es en casos como estos donde un quiromántico sensible y bondadoso puede ayudar, guiando y motivando a la persona para que inicie una nueva vida.

Es común ver una cruz grande dentro del cuadrángulo. Una parte de la cruz está formada por la línea del destino, y esta es atravesada por otra línea diagonalmente. Es una señal de éxito final, pero después de muchas dificultades. Cada vez que la veo en una mano, estimulo a la persona a que sea persistente, porque esta cruz puede ser muy frustrante, incluso para quienes suelen ser pacientes.

De vez en cuando encontrará otra cruz dentro del cuadrángulo, formada por dos líneas secundarias. Ésta se conoce como la cruz mística, y quienes la poseen tienen un fuerte interés en el mundo psíquico.